Capacitación – El terreno donde se juega el Presente y Futuro de las Empresas

Según la Encuesta Longitudinal de Empresas, en Chile sólo un 7,4% de las empresas participan de cursos formales de capacitación.

Por: Tatiana Medel / Comunicaciones LATAMNOVA

Capacitar, según señala el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE), es iniciar un proceso cuyos objetivos sean la promoción, facilitación, fomento y desarrollo de las aptitudes, habilidades o grados de conocimientos de las y los colaboradores. En este sentido, se busca por un lado, mejorar las oportunidades y condiciones de vida para las personas capacitadas, y por otro, incrementar la productividad en la empresa.

De esta forma, los constantes cambios y avances tecnológicos, las modificaciones en las estructuras administrativas y financieras de las empresas, las nuevas modalidades de trabajo (este año ha sido el ejemplo más claro con la incorporación masiva del teletrabajo) y en fin, los cambios propios de la vida moderna, requieren de una capacitación contínua de las personas para que las empresas puedan sostenerse actualizadas.

Sin embargo, la realidad en Chile sobre la materia es compleja. De acuerdo al informe de Espacio Público (ver+) sobre “Cómo, Cuánto y en qué capacitan las empresas en Chile”, que recoge los datos de la Tercera Encuesta Longitudinal de Empresas en Chile, sólo un 7,4% de las empresas indicaron que alguna de ellas participó en cursos formales de capacitación, y cuando nos referimos a colaboradores de empresas del sector privado, la cifra se reduce a 4,6%.

Las razones de estos números, es decir del bajo porcentaje de empresas que capacitan a sus colaboradores y colaboradoras, son variadas. Hay muchas empresas que desconocen la disponibilidad capacitar con financimiento imputable a franquicia tributaria SENCE, no saben que existe o simplemente no saben cómo usarla. Faltan instancias de coordinación entre el Estado, las empresas y los trabajadores, que permitan comprender la relevancia de la capacitación, entendiendo que no se trata de un gasto para el empleador, sino de una inversión. Ocurre de hecho, en ciertas empresas que existe temor a que las personas capacitadas, al adquirir mayores herramientas, puedan ser requeridas por la competencia. Esto último provoca que las empresas vean a la capacitación como una amenaza y no como la oportunidad de agregar valor a su organización, que sería lo adecuado.

Pero el desafío, parece no ser solo chileno. Según el artículo “La capacitación como herramienta efectiva para mejorar el desempeño de los empleados”, publicado el 2016 en la Revista Técnica Administrativa de la Editorial Ciencia y Técnica Administrativa de México “El contar con una capacitación eficiente permite a la empresa tener innovación, desarrollando estrategias competitivas, corporativas y funcionales, apoyado en el uso de tecnologías de información, con un sentido ético y de responsabilidad social”. La capacitación debe entenderse no como una obligación de la empresa con sus empleados, sino como una inversión que finalmente entrega beneficios tanto a la organización como a cada una de las personas que asiste y participa de estas instancias.

Así lo reconoce la, investigadora y socióloga chilena de la Universidad de Chile, con una Maestría en Políticas Públicas de la Hertie School of Governance de Berlín, Eleonora Nun, quien ha señalado que “Para decidir capacitar a sus trabajadores, las empresas enfrentan distintos obstáculos. El más importante es mantener los procesos productivos al contar con menos trabajadores durante la duración de la capacitación”. Esto ha implicado que las empresas prefieran realizar las capacitaciones fuera de la jornada laboral, esperando que la participación sea voluntaria y, motivada exclusivamente por el beneficio personal que trae. Esta visión, a la luz de los datos, mayoritaria en nuestro país, ha impedido que la capacitación se comprenda como parte del ciclo de gestión de personas en las organizaciones. Si todos y todas tienen mejores competencias, por cierto que mejorarán los resultados de la organización.

Contradictoriamente, según el informe “Actualidad del Mercado Laboral en Latinoamérica” elaborado por The Adecco Group (Ver+), en Chile el segundo beneficio laboral más valorado en un trabajo, luego de un equilibrio entre la vida profesional y laboral (46.56%), es justamente la capacitación que ofrecen las empresas (39.51%). Sin embargo, como se indicó anteriormente, la cantidad de empresas que realizan la capacitación está lejos de responder satisfactoriamente a esta demanda, o a este nivel de valorización que existe por parte de trabajadores y trabajadoras.

Las oportunidades para capacitar son muchas y están disponibles año a año para las distintas empresas de nuestro país, quienes disponen de un monto equivalente al 1% del total de su nómina de remuneraciones anuales – es decir, de todo lo que la empresa paga en sueldos durante el año, un 1% puede ser destinado a optar a la franquicia tributaria – para capacitaciones. Inclusive, las empresas que se apoyan para gestionar su capacitación en las OTIC (Organismos Técnicos Intermedios de Capacitación), pueden hacer uso de los recursos de capacitación del año anterior – monto denominado “Excedentes”.

Con todo lo anterior, LATAMNOVA como Organismo Técnico de Capacitación (OTEC), busca apoyar a las empresas, no sólo brindándoles un servicio de capacitación excelencia, sino que apoyándoles en cómo maximizar el uso de sus recursos de capacitación disponibles.

Te invitamos a ser parte de la formación y refuerzo de las habilidades de tus colaboradores y colaboradoras. Para recibir más información contáctanos a través de contacto@latamnova.com.

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